Hace dos años, Almita le prometió a su madre que iría a visitarla a Puebla. Sin embargo, desde entonces no ha sabido nada de ella. A pesar de esto, Doña María no pierde la esperanza de volver a ver a su hija. Todos los días, desde las 6 de la mañana, se sienta en el mismo banco de la terminal de autobuses, esperando que Almita aparezca.
El amor de una madre
En el video, se puede ver a Doña María con una foto de su hija en la mano. Mientras habla, la emoción es evidente en su voz. «Yo sé que ella va a pasar por mí; ha de estar arreglando lo de la escuela de sus hijos… amamos y respetamos a nuestros padres, pero nuestros hijos dependen totalmente de uno, entonces yo no se lo tomo a mal que ella tarde; yo sé que, tarde o temprano, mi hija va a pasar por mí», dice la mujer.
El video de Doña María se ha vuelto viral en las redes sociales. Miles de personas han compartido la historia y han expresado su apoyo a la mujer. Incluso, algunos usuarios han creado una campaña para ayudar a Doña María a encontrar a su hija.
Un mensaje de esperanza
La historia de Doña María es un recordatorio del amor incondicional que las madres tienen por sus hijos. A pesar de la distancia y el tiempo, Doña María nunca ha perdido la esperanza de volver a ver a su hija. Su historia es un mensaje de esperanza para todas las personas que están esperando el regreso de un ser querido.