En las últimas horas, un fuerte estruendo estremeció las tranquilas faldas del cerro de Topo Chico, sembrando momentáneo pánico entre los residentes de la zona. Este incidente fue provocado por un deslave repentino que arrasó con todo a su paso, incluyendo dos viviendas que quedaron sepultadas bajo toneladas de escombros. Afortunadamente, y según reportes de las autoridades locales, no se registraron víctimas fatales.
El deslizamiento ocurrió en una zona habitacional cercana al cerro, donde las lluvias recientes habían debilitado la estructura del terreno, propiciando la caída de rocas y tierra sobre las casas cercanas. Vecinos del área describieron el momento como aterrador, con el estruendo del deslave resonando por todo el vecindario y generando una estampa de caos y confusión.
Autoridades de Protección Civil y cuerpos de rescate acudieron de inmediato al lugar para evaluar los daños y brindar apoyo a los afectados. Se desplegó personal especializado en búsqueda y rescate para descartar la presencia de personas atrapadas bajo los escombros. Afortunadamente, tras intensas labores de búsqueda, se confirmó que no había residentes dentro de las viviendas al momento del deslizamiento.
Este incidente ha generado un llamado de atención sobre la necesidad de medidas preventivas en zonas vulnerables a deslaves, especialmente durante la temporada de lluvias. Las autoridades locales han iniciado evaluaciones para determinar la seguridad de otras áreas cercanas y están proporcionando apoyo psicológico a los residentes afectados por el susto y la pérdida material.