Aumenta la presión en Puebla para capturar a figura clave del crimen

Las autoridades de Puebla han intensificado la búsqueda de una mujer identificada como “La Reina del Sur”, presuntamente vinculada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Según fuentes oficiales, se le considera una de las figuras criminales más influyentes de la región. Su nombre ha ganado notoriedad no solo por su supuesta participación en actividades ilícitas, sino también por el nivel de poder que, aparentemente, ha logrado ejercer tanto dentro como fuera de prisión. Esta situación ha generado alarma entre las instituciones de seguridad, ya que refleja la complejidad de desarticular redes criminales con estructuras bien consolidadas.

Expansión de poder a pesar de antecedentes violentos

Aunque cuenta con antecedentes ligados a hechos violentos, «La Reina del Sur» habría eludido varias sanciones judiciales. Versiones preliminares apuntan a que se benefició de mecanismos legales que le permitieron continuar con sus operaciones, incluso desde reclusión parcial o con medidas menos restrictivas. La posibilidad de que su red incluya contactos estratégicos tanto dentro del sistema penitenciario como en esferas externas, plantea serias dudas sobre la eficiencia de las instituciones encargadas de frenar el avance del crimen organizado.

Influencia criminal y riesgo institucional

La presunta capacidad de esta figura para operar con relativa libertad ha generado preocupación entre analistas de seguridad. Su caso refleja un fenómeno recurrente en el que criminales de alto perfil logran mantener el control operativo a través de terceros, comunicaciones cifradas o estructuras descentralizadas. Este tipo de liderazgo perpetúa las actividades delictivas sin importar el encarcelamiento físico, lo que debilita la percepción de justicia y alimenta la sensación de impunidad en la sociedad.

Consecuencias para la seguridad regional

La continuidad de operaciones del CJNG en Puebla, presuntamente bajo la dirección de figuras como «La Reina del Sur», representa un riesgo directo para la estabilidad social y económica de la región. La expansión de su influencia podría estar vinculada con actos de violencia, extorsión y tráfico de drogas. Además, la falta de acciones contundentes para neutralizarla podría erosionar la confianza ciudadana en el aparato judicial y de seguridad pública.

Necesidad urgente de una respuesta institucional firme

La captura de esta operadora criminal se perfila como un paso fundamental para desarticular al menos una parte del aparato del CJNG en Puebla. Más allá de lo simbólico, representa la oportunidad de restablecer el principio de legalidad en una zona fuertemente impactada por la criminalidad organizada. Las autoridades tienen ante sí el reto de actuar con celeridad y transparencia para evitar que casos como este sean replicados por otras figuras del crimen que se sienten fuera del alcance de la ley.