
La sensación de estallido en los oídos durante un vuelo ocurre por los cambios de presión en la cabina del avión. Nuestro oído medio está conectado a la parte trasera de la nariz mediante la trompa de Eustaquio, que regula la presión interna del oído. Cuando el avión despega o aterriza, la presión externa cambia rápidamente y, si esta trompa no se ajusta con la misma velocidad, se genera una molestia o incluso dolor.
Algunas personas son más sensibles a estos cambios, especialmente si están congestionadas por una gripe o alergia. Para prevenir esta incomodidad, se recomienda bostezar, masticar chicle o tragar saliva con frecuencia durante los cambios de altitud. Estas acciones ayudan a equilibrar la presión interna con la externa.
También existen métodos adicionales como usar tapones especiales para vuelos o practicar maniobras como la de Valsalva (exhalar suavemente con la nariz tapada y la boca cerrada). Estos consejos son útiles para evitar el dolor de oídos y disfrutar un vuelo sin molestias auditivas.